La radiofrecuencia corporal es un tratamiento estético que trata de generar un calentamiento de la dermis, con el objetivo de calentar los fibroblastos para estimular la producción de colágeno y elastina de la piel, consiguiendo así, eliminar celulitis y flacidez. Se produce un calentamiento de entre 38º y 41º en la dermis sin que se vea afectada la epidermis. Es un tratamiento no agresivo e indoloro.

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Para entender el proceso, es importante que sepas que son los adipocitos, ya que son la mayor preocupación de todas las mujeres. Los adipocitos son células de grasa que se van acumulando justo debajo de la dermis, es decir, en la hipodermis, modificando la silueta y el aspecto natural de la piel. Pueden llegar a provocar a veces, obstrucción de arterias y venas, así como, dificultar la circulación sanguínea y complicar la circulación del sistema linfático (sistema de desechos del organismo). Si esto se agrava, por subidas y bajadas de peso, problemas de una inadecuada alimentación, cambios hormonales...todo ello, deriva en la temida piel de naranja (celulitis).

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En cuanto a la flacidez, es provocada por un envejecimiento prematuro de la piel, provocado por una disminución  del metabolismo celular; como consecuencia la biosíntesis de colágeno y elastina desciende. El número de fibroblastos desciende y la dermis al perder su trofismo normal se empobrece y pierde la capacidad de su recambio natural. En definitiva, a flacidez es un fallo de las fibras de colágeno y elastina y de la sustancia fundamental.

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La Radiofrecuencia corporal produce un calentamiento profundo que afecta a la piel y al tejido graso subcutáneo. Dicho calentamiento va a favorecer el drenaje linfático, lo cual permitirá disminuir los líquidos y toxinas, en el que se encuentran embebidos los adipocitos del tejido afectado por la celulitis. A su vez, se producirá un aumento en la circulación de la zona, que permitirá mejorar el metabolismo tanto del tejido graso subcutáneo como la mejora del aspecto de la piel acompañante.

Y por último, y más importante, la Radiofrecuencia provoca la formación de nuevo colágeno, tanto en la piel como en el tejido subcutáneo, permitiendo que, todo el tejido adquiera firmeza gracias a la reorganización de los fibroblastos.

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El número de sesiones es variable, pero se consideran necesarias un mínimo de entre 8 y 12 sesiones máximo, siempre con continuidad y constancia del tratamiento. Variará el número de sesiones, dependiendo de la persona. 

Una vez terminado el tratamiento, se recomienda dar al menos 1 sesión preventiva a los 2 o 3 meses desde que finalizó el tratamiento. Los resultados de la radiofrecuencia se componen de una parte de efecto inmediato y otra progresiva durante los 8 meses siguientes a la finalización del tratamiento, tiempo en el que se regeneran las células de colágeno y elastina.

En nuestro centro, siempre te aconsejaremos sin coste alguno, sobre qué tipo de tratamiento te viene mejor, siempre estará adaptado a cada caso particular.

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En Centro Malleza, podrás elegir entre varias zonas del cuerpo dónde realizarte el tratamiento de Radiofrecuencia corporal: